domingo, 22 de febrero de 2015

...Y COMIERON PERDICES








...Erase una vez un bosque encantado donde habitaban en perfecta armonía y desde la eternidad de los relojes, todos los personajes de los cuentos, animales fabulosos y criaturas fantásticas de relatos y cómics, inventados por la imaginación del hombre. Nadie sabe a ciencia cierta que fue lo que ocurrió...se desconoce la causa, se ignora el motivo, y entre interrogaciones todavía suspendidas en el aire cuelga una pregunta, cual  fue el detonante que convirtió la alegría y el buen vivir de un lugar mágico en un vulgar infierno...La verdad es qué en los últimos años, y desde que en la mente humana, la palabra crisis ocupara con sus derivados y esbirros, cada uno de los rincones dedicados al ocio y la creatividad, se empezaron a suceder una serie de extraños acontecimientos qué como mínimo atrajeron primero la curiosidad, y después la preocupación entre los ciudadanos de la espesura...y es qué quizás ese fuese el principio...de repente Mickey y Minnie Mouse necesitaron cuidados médicos, las arrugas y las canas habían hecho mella en su físico y el deterioro era inminente...Tío Gilito murió una madrugada de un ataque al corazón y su sobrino Donald tan avaricioso como él, invirtió la fortuna legada en oscuros negocios que acarrearían terribles consecuencias a sus vecinos...en invierno, El Coyote por fin atrapó a Correcaminos y terminó sus miserables días esclavizada en su guarida...Los pitufos dejaron de ser azules, a la abeja Maya las rayas se le trucaron en cuadros y David el Gnomo salió en las oposiciones como funcionario recolector de setas…El paraíso natural de frondosa vegetación y árboles milenarios, se fue transformando lentamente en horizonte gris según la burbuja inmobiliaria crecía, inflada por la ambición corrupta de unos pocos que hicieron de este paraje sin igual, objeto de sus deseos financieros y mercantiles...y de sus antaño, felices moradores ficticios, en simples individuos mortales, sometidos a la deriva de sus virtudes y defectos, y a la implantación de crueles leyes y de abusivos impuestos que obligaban a sobrevivir de cualquier manera...Así, Hansel y Gretel tuvieron que abandonar la casita de chocolate y aprender a cazar vampiros, Pinocho desenterró su nariz mentirosa de la tumba de Geppetto y  de feria en feria mostraba por unas monedas, entre burlas y carcajadas, sus vergonzosas debilidades, y Ali Baba entró a formar parte de la banda de los cuarenta ladrones, siendo reconocido como el mejor por sus secuaces, en tan solo unas semanas ocupó el puesto de jefe, vacante por una absurda disputa de navaja y borrachera, a ver quien era el más valiente y ponía el cascabel a Garfield, el gato...dueño de una poderosa multinacional, que contaba en nómina a 101 Dálmatas, los Aristogatos y los dibujos de Hanna-Barbera, incluidos los Picapiedra, Scooby Doo y los autos locos...