• Sin saber realmente como afectaría el cambio a nuestra burbuja, el encuentro quincenal se llevó a cabo un miércoles (la primera vez desde la andadura levítica que empezó allá por el 2011...¿puede ser?), quizás es que este lunes 23, se había levantado demasiado mojado, o quizás es que desde que tenemos la posibilidad telefónica de comunicar al instante el estado de ánimo, parece resultar más fácil hacer o dejar de hacer según nos convenga, amén (y en esto estamos todos de acuerdo), de las cosas importantes que nadie duda siempre son más que una cita con unos locos del papel y la tinta perdidos en divagaciones e imaginación y empeñados en sacar sentido a letras, silencios y palabras...pero independientemente de charcos, mosqueos o mira tu que bien, a lo que íbamos, tarde de viento y estreno de "habitación propia"...sesión extraña y diferente, (mitad de semana, las ausencia, el sitio)...algo pululaba en las gargantas calladas de los asistentes...quizás no lo sepamos nunca o puede que sea una transformación necesaria de los limites de nuestra pompa de aire misterioso y embriagador en su afán de seguir siendo, cada segundo y cuando coincidimos, más mágica...

  • La sala nos espera en penumbra, con la puerta de par en par, quizás por el calor con sabor a primavera, o quizás por que, intuitiva, sospecha que la burbuja puede estar apurando los últimos minutos entre sus cristales, su enorme mesa y esas sillas que poco a poco se nos van quedando muy justas…aquí charlando parece que hasta se esta a gusto, un leve recuerdo con risas dibujadas al enfrentamiento de una pompa con nuestra bruja particular, el toqueteo del aire acondicionado, las ausencias, los retrasos, pero por fin llega la hora de la verdad…los fluorescentes se encienden…entonces todo vuelve a su ser…el encanto fugaz de “da igual donde estemos”, se evapora con el “…hoy tampoco puedo ir…” el doble mensaje de otra pompa el primero para decir que no viene y el segundo para informarnos del atasco donde el gigante de mar y olas, está atrapado, y la sensación en nuestras caras de que después de un himpas efímero, nada cambia…entonces llega la sorpresa con el color a cuestas, energía renovada y una coca-cola en la mano para desafiar tanta norma absurda que sin querer y queriendo, condiciona conversación, carcajadas y esa conciencia con cosquillas que la gente de bien se empeña en llevar alerta…la pirueta del instante en un trapecio imaginario se transforma en una palabra: “empezamos”, y…una ligera brisa marina invade los ánimos y Neptuno con gafas y camiseta de manga corta, como si nos hubiera oído, pone en hora los relojes y al robo de un sitio que no contempla el cartel, el cronometro a cero, y sí…empezamos…y en el aire suspendida la magia, invisible, transparente, que se cuela por las rendijas de la razón para que palpemos su poder, por qué la notamos, la sentimos, aunque nos empeñemos en mirarla de reojo y esquivemos su roce por si acaso nos contagia de sentimiento y emoción, pero caemos, caemos con vértigo por el abismo de la inconsciencia y nos entregamos sumisos al encanto del momento presente…

  • Seducida por incertidumbre y expectación, las cómplices fichadas de la famosa intriga, la burbuja acudió este lunes vestida de casi completa para un encuentro, anunciado a bombo y platillo y también de soslayo, con el nuevo habitante de su particular mundo...acudimos, digo, animados y dispuestos, a la cita en una tarde ventosa y descarada, y digo también de casi completa por que sólo faltó una pompa, avisando eso sí, que no llega a tiempo, y despidiéndose con el verbo disfrutar utilizado como si supiera que en nuestra disposición era el que mejor íbamos a conjugar...el resto de sus iguales fuimos llegando con cuentagotas, así se disimuló con los retrasos, el relleno de los huecos prohibidos con sillas robadas, los últimos en llegar nuestros gigantes, primero el de mar, después el de algodón...hubo presentaciones, sonrisas y ganas por empezar...

  • Con el invierno en los huesos, el frío también, la burbuja acudió intrigada a un encuentro que a priori ya se presentaba un tanto especial...ella se sabía importante este lunes, pues venía a conocerla mejor, quien tantas veces había deseado, alguien que guiara o por lo menos aunara, ganas, motivación y expectativas, y allí esperando, estaba Diego...pero nuestra burbuja no se puso sus mejores galas, ni se acicaló en exceso para la ocasión, tampoco presumió coqueta de sus encantos (muchos), simplemente fue ella, tal cual, mágica otra vez...nos dimos cuenta rápido, nada más llegar y sentir como envolvía la figura de otro gigante, no el nuestro de algodón, al que por cierto echamos de menos (cosa rara que faltara), este más bien resultaba un gigante de espuma y olas...su voz llegaba a la orilla, nos bañaba y se recogía en las profundidades misteriosas que luego nos regalaba con pensamientos, deducciones y sorpresas...en su sencillez, la burbuja no engañó con falsas promesas ni adornos hipócritas, prueba evidente los ausentes, que esta vez dolieron si cabe más, quizás ninguno intuimos (coincidiendo) que por fin parecía que habíamos encontrado lo que tanto buscábamos, pero qué iba a ser necesario complicidad, el guiño y la opinión pintada la cara y el gesto de todos y cada uno de nosotros, humildes habitantes de esta pompa que ya llevamos inevitablemente cosida al corazón y al alma...

  • Tiritando, después de una obligada hibernación por las fiestas de Navidad, la burbuja empezó el año nuevo algo griposa, contagiada sin duda por, las ausencias que como ella fueron victimas del frío, las heladas y los cambios de temperatura, que de eso sabe mucho la magia pomposa de nuestro mundo particular...y aunque el momento comenzó con una cierta continuidad y apenas sin cambios que resaltar, si hubo algo distinto, quizás un leve toque de incertidumbre que se nos notaba en la cara a los asistentes en este 19 de enero, embadurnado de sensaciones invernales pero dispuesto a despertarnos, a golpe de palabra y tesón voluntarioso, de por si acaso, la pereza y el sopor que nos envolvían, por que hay que ser sinceros, a veces no es suficiente una mesa, las sillas y el aire caliente que nos sirve de banda sonora cuando un silencio raro se hace notar, con los nervios a flor de piel y tan impaciente...

  • No se sabe ni como ni por qué, pero la burbuja sigue adelante, quizás en ese misterio esté la gracia de buscarle las vueltas a una razón que a algunos de sus habitantes, como en mi caso, se nos escapa...curiosa y traviesa, acudió este lunes espeso y desangelado a una cita inusual en un Cafetín, El Desván...con algunas expectativas esperanzadoras después de los últimos correos donde lo tantas veces cacareado y por fin en aras de conseguirse, la posibilidad de un profesor que nos levantara el ánimo y la motivación, el debate o la decisión final de qué haremos con nuestras pompas ilusorias, tuvo que aplazarse por las ausencias...total que con el gozo del ambiente en un pozo de espera, intentamos sacar provecho sin embargo del momento y del lugar...todo terreno, la magia se adaptó perfectamente a ruidos, gente, voces y demás sorpresas que deparó la novedad...bebimos, charlamos, reímos y fuimos al grano de la cuestión, las opciones quedaron claras flotando en el aire y respirando sus posibilidades leímos y leímos, disfrutamos y volvimos a disfrutar de lo único intocable acaso de este universo de inspiración que terminó una función inolvidable de uno de diciembre, pagando las viandas y pagando el encargo del ¡¡¡ojalá nos toque!!!..no estaría mal la verdad, a fin de cuentas no creo que nadie escribiera con pluma de oro, pero quien sabe si los lunes no serían más burbujeantes  y encantadores que nunca...por qué este cuento, con gordo o sin él, CONTINUARÁ...¿no?,,,

  • La burbuja montó en tren para volver a los reinos fantásticos de la calle Puebla...es lunes 17 de noviembre y la tarde pinta gris pálido y suave...con tiempo de sobra hasta la cita mágica, hay paseo y café caliente con bollo y sin él, hay calma y nervios, conversación y silencio...Nos reciben con los brazos abiertos y cariñosos, de quienes saben y confían, que podrán contar siempre con fieles y devotos habitantes y aprendices, de este universo único que ellos también moran y componen...y por supuesto, nuestra pompa inconformista de ilusión y ganas, se lo recuerdan con su presencia puntual a la cita convenida...Esta vez E.T nos recibe con peluca rubia, sombrero y camisón, y el orco que flanquea la escalera de acceso, incluso relaja sus gestos y sus armas a nuestro paso...perennes en su mundo particular, los mismos jugadores siguen jugando al mismo juego, intrigante y eterno, atrapando en el ambiente emociones que contagian...será por eso que todo es fácil, más en un espacio como hecho a medida, atusado y coqueto, ideado de calor amigo, unas sillas en hilera y un micrófono, enmarcado por el suelo de colores desgastados, y los ladrillos rojizos que hinchan las bóvedas que nos arropan con ese toque especial y encantador, que sin embargo y a veces tienen las cosas improvisadas...y mientras arriba reposan los libros en sus estantes, las camisetas en las paredes, y los muñecos y curiosidades en sus vitrinas, abajo da comienzo el espectáculo...el que inventa nuestra imaginación o...mira que si somos nosotros los inventados...

  • La tarde se presentó con credenciales de invierno: viento, frío, lluvia...oscuridad y tristeza bien podrían haber sido el titulo de un relato que describiera a la burbuja de un lunes casi casi como desmayado...lánguido, lento, apático...en la conciencia mágica, lejano quedaba el último que nos había reunido y la pausa de la jornada fantástica en Madrid...y así, flotando, como en una nebulosa de conversación, acunados por el dejarse llevar y a ritmo de unas agujas de reloj que marcaban el paso, volvimos a la Caja del Arte, que nos recibió entre carteles de silencio y de limites de aforo...la sala de siempre se iluminó y una pompa ilusa y gélida empezó a inflarse para contaminar las ganas, y es que yo no las encontraba por ningún lado, a pesar de que en mi interior latía una sensación impaciente y nerviosa que pugnaba por hacerse hueco en mi voluntad, para poner calma y cordura a un remolino desordenado de ideas cansadas que golpeaban constantes contra mi mente y contras mis oídos...pero bastó con no querer escuchar esa insistencia negativa para poder entregarme de lleno a las sonrisas, las palabras y las historias por surgir...y como gotas de lluvia a través del cristal, se fueron recortando figuras conocidas, llenando ese vacío absurdo donde rebotaba el eco de mi desasosiego...entonces fue cuando la magia volvió... 

  • 20 de Octubre...una sonrisa teñida de gris y blanco, los sempiternos pantalones vaqueros y la palabra fácil y amable, recibieron a la burbuja, que había salido de marcha a explorar otras magias, en otros espacios y en otros mundos...este, que nos dio la bienvenida desde escaparates rellenos de fantasía y embrujo, estanterías repletas de comics, y libros de sugerente portadas que invitaban al misterio y a la aventura, camisetas originales, juegos y jugadores en plena acción, muñecos y reproducciones para coleccionistas y contempladores de sueños, este digo, de una librería más como un paraíso para perderse por pasillos, recovecos y bóvedas, nos encantó desde el principio...E.T. mirándonos tierno a través del cristal, y un orco amenazante al bajar la escalera que nos llevaba a la sala donde se efectuaría el acto que íbamos a ver, hicieron de anfitriones a nuestra imaginación, que terminó desbordándose en un éxtasis perfecto cuando nos sentamos a escuchar y expectantes aún, dejamos paso a que otra pompa enorme aterrizara en alfombra voladora en nuestro sentir y nuestro disfrute...

  • Lunes, 6 de Octubre...el verano parece resistirse, las ventanas siguen abiertas y el sol nos saluda desde su ocaso en tonos rosas...vamos llegando uno a uno, tranquilos y contagiando el espacio, acogedor y fresco, de conversación, risa y gesto expectante...sabemos y somos conscientes que para que todo siga igual, algo o mucho debe cambiar, y tenemos ideas, intención y ganas, entonces momentos del café sin café, y el hielo roto que se derrite sin darnos cuenta, que nos sumerge sin más en la complicidad de lo ya conocido...luego, inevitables, las piezas se colocan en el imaginario formal y tratamos poco a poco de encajarlas en un puzzle inventado para la ocasión...es cuando algo se mueve, gira, retorna, vibra y se estampa, por que nos ponemos de acuerdo, una etapa de nuestra pompa acaba y empieza otra...

  • Olía a primavera recién nacida, a la sorpresa de una lluvia fresca y rebelde que empapaba el último momento, revoloteaban en copas improvisadas las otras burbujas, las de cava, también mágicas...permanece aquella tarde de Mayo por que quiere estar en mi memoria, permanece a pesar del verano y a los preámbulos melancólicos del otoño en ciernes...un jardín engalanado para la ocasión, la charla compartida regalada de noticias y debate, la compañía grata y amena...minutos para saborear cada instante ofrecido por el azar y el destino, y que hoy vuelve al paladar de la emoción y el sentimiento convertidos en palabras escritas, a base de recuerdo y presente...el azar y el destino que han tocado con su varita de realidad esa pompa de jabón, como suspendida en el aire, para que explote dulcemente y moje de sentido esa fecha del calendario...

  • Quien nos lo iba a decir, y precisamente en una sala más pequeña de lo habitual, allí nos esperaban todos los colores de las carpas circenses del mundo, sus originales y fantásticos habitantes, y las historias que cada uno, incluso sus espectadores, guardaban, unos en el alma, otros en el corazón, la mayoría en la memoria...bajo las lonas de rayas amarillas, rojas, blancas, azules y naranjas, la burbuja se hinchó de magia, la de los magos y prestidigitadores, la de los ilusionistas y sus trucos, se embelesó con un trapecio preparado para la ocasión, meciendo sus piruetas imposibles, se sorprendió por los asombrosos juegos malabares y los cuerpos de goma de los contorsionistas, se conmovió con la sonrisa triste de los payasos, tembló con el látigo sentimental de los domadores valientes, o no, que casan su vida con la de sus animales...increíbles, salvajes, simpáticos, humanos, porque de todo hubo en las dos horas de un lunes caluroso llamado 5 de mayo...

  • Tarde de lunes pasada por agua y vuelta al redil del silencio y la mesura...sesión tranquila de recuerdos a Gabo, de empeños y papeles, de ausencias a las que no nos acostumbramos y lecturas sosegadas, bueno más o menos...algo o mucho nos revolvieron por dentro con su "¿Qué pasaría si...?"...hubo tormenta y calma, quizás a la espera de que salgan a flote sentimientos y sensaciones latentes y encontradas...¿se puede pedir más emoción a la burbuja que además de mágica, es más humana que nunca?...

  • Lo daba la tarde, los sillones, la compañía...un lunes casi veraniego y la burbuja estallando en ganas, y más cuando estrenó espacio al aire libre...y no sé si sería el sonido de los pájaros o el otro silencio, o la luz que se colaba entre el verde que adornaba el entorno, pero lo cierto es que vivimos una sesión diferente y a la misma vez, tan intensa y necesaria como las demás...aunque, sobrevolada por un "primer amor" rebelde y revelador, se instaló en nuestro ánimo común esa sensación dulce de asistir a lo entrañable de una manera sutil y acogedora...y eso que acabamos tarareando desafinadamente el "Sólo Tú" de Matia Bazar, poniendo banda sonora a la emoción y la memoria de cada instante transformado en letra y palabra...retamos al tiempo, no llovió, supongo que la naturaleza respetó, por sí acaso, el hipotético "¿Qué pasaría si...?", de verdad un día, la burbuja estallara y todo su contenido emocional se desbordase...entonces si que la TodoPoderosaTierra tendría que guardar fuerzas para cargar y aplacar después, la tormenta única y salvaje, la que cada una de las pompas inventamos por dentro, y a veces, hasta por fuera...

  • La primavera nos dio la bienvenida con su roce cálido y acogedor...la última noche dio el juego suficiente a palabras, emociones y recuerdos que en una algarabía de buenas intenciones, sembró el camino de "primeros amores" para el próximo encuentro de esta, nuestra burbuja, rebosante y pletórica de embrujo y hechizo, el que nos encuentra, nos envuelve y nos mantiene vivos en la ilusión de ser, estar y compartir...

  • P.D:...Mira que sí ayer 24, me equivoqué de lugar y asistí a una sesión de exorcismo...eso tuvo que ser...tanto mojarse y lo que salió de cada uno con el por qué y el para qué escribimos...claro que luego no me quería separar de los espíritus con chaleco, que difuminados en amarillo infinito me rodeaban, unos llevaban lazos enormes sobre la cabeza, otros sombrero de copa o gorra, y hasta antifaces y pajarita adornaban la osadía de algunos...bailaban enredados en boas de plumas provocadoras y cantaban una extraña canción, que llevaba mi nombre...mira que sí...no, no...debo estar volviéndome loca...ahí están...los estoy viendo...¡joder esperad!...no me dejéis aquí, llevadme con vosotros...

  • Ayer, 10 de febrero, yo no flotaba en la burbuja por su propia inercia, ni por las historias que en vuestras voces se convierten en sueños, tampoco floté por la necesidad inevitable de compartir papel y letras, ni por ser tarde de lunes, de esos mágicos que a mi me contagian de infinito y amarillo...ayer yo flotaba porque estaba con vosotros, con cada uno y con todos, también contigo Ismael, en esa tu ausencia y tu distancia...parece fácil echar flores de tinta, pero se notaría mucho si no las sintiera brotar y florecer en mi corazón...ese que ha aguantado de momento 18.250 días, con el latir, a veces ligero, los más a trancas y barrancas, porque los sentimientos, las emociones, el vivir en resumen, pesan...por eso nadie me hubiera dicho hace un tiempo, que a mis cincuenta me quedaría sin palabras y en silencio, aunque en mi cabeza, en mi alma y en mi pulso, millones se desperdigaran para aunarse en un nudo en el estómago, con un gracias atascado y afónico en la garganta, que apenas si pudo traducirse en lágrimas por decir algo, y el agradecimiento quedó entonces relegado, en los posos de la cafetera, en el cuchillo de partir la tarta y en las bolas escurridas de un té inglés...y ha reposado esta noche conmigo, en mi almohada y debajo de mi piel, para estamparse de lleno ahora, en este mismo instante y siempre, en quienes, cómplices y amigos, me permiten sin peajes, sin normas, porque sí y también...ser como soy...¡¡¡GRACIAS!!!

  • He cometido el peor de los pecados/que un hombre puede cometer. No he sido/feliz.Que los glaciares del olvido/me arrastren y me pierdan, despiadados./Mis padres me engendraron para el juego/arriesgado y hermoso de la vida,/para la tierra, el agua, el aire, el fuego./Los defraudé. No fui feliz. Cumplida/no fue su joven voluntad. Mi mente/se aplicó a las simétricas porfías/del arte, que entreteje naderías./Me legaron valor. No fui valiente./No me abandona. Siempre está a mi lado./La sombra de haber sido un desdichado...Y así empezó un encuentro más en la burbuja, y se desparramaron al ritmo de estos versos y otras historias, por esquinas y rincones de la sala, todos los demás pecados...

  • Música y pompas de jabón que explotan al mismo ritmo...el de las palabras y los silencios, los espacios en blanco y la tinta, las prisas y las pausas...la burbuja desplegó portadas de discos que sonaron a historias, personajes y entrega...notas en un papel en blanco para narrar mirando a los ojos de los sentidos, del corazón y el alma...y otra tarde noche para desafiar a la luna con el hechizo de cada uno guardado en el bolsillo...

  • La burbuja traviesa susurró al oído de la imaginación más rebelde, tentación, pecado y tabú en la posibilidad de un relato erótico, y esta sonrió descarada con el regalo cálido de una sesión bañada en colores tenues y palabras rizadas al ritmo del deseo y la pasión...o al menos eso se intentó, lo cierto es que compartimos momentos de reverencia hacía esa burbuja que nos embrujaba con el aroma y toque de una tarde especial...húmeda, sensible y puede que hasta reveladora...

  • Las pompas se hacen íntimas, personales...y casi en familia, departimos sobre personajes, fechas que marcan su devenir y su ser, quizás también el nuestro, y anécdotas que se evaporan en el ambiente, mojándonos, con el calor intenso y dulce de la buena compañía, y el guiño cómplice de sabernos únicos en cada momento que surge, de la magia emocionante de las palabras y los escritos...

  • La burbuja se viste de octubre para volver a nosotros maquillada de ausencia y melancolía...sus pompas mágicas nos buscan entre la nostalgia del séptimo cielo y la ilusión renovada de nuestra tinta, queriendo romper con ganas rebeldes que laten entre historias y palabras, con esa tristeza y ese vacío que ha salpicado a borbotones estos dos primeros encuentros, cargados eso sí y hasta las trancas, de sentimiento, complicidad y emoción...un cuadro de colores vivos y playa de verano con sol y una caja encontrada en la puerta, han iniciado una temporada que aparte de otoño, promete calidad, calidez, y a fuerza de libertad, otros envoltorios...


  • Acudí a la casa de la diosa temprano, muy temprano, pidiendo socorro...quería cuanto antes empaparme de burbujas y magia...mi mente y mi alma necesitaban urgente un baño de espuma amiga, un masaje de palabras elegidas, un traje nuevo combinando verdad e ilusión, así es que sin avisar, llamé a la puerta y la diosa me recibió más humana que nunca, envuelta en su aroma de bosque encantado, regalándome la sonrisa de una sorpresa amable...a la hora convenida, esa donde los relojes se quedan en blanco y el tiempo no entiende de minutos y almanaques, el timbre se confundió con los acordes embrujados de unos altavoces protagonista, y del descansillo de la escalera rescaté por intuición a tres habitantes de esa, esta, enorme pompa de complicidad y presente que inventamos desde y para compartir el nosotros...a partir de ahí, el jaleo de conversaciones, saludos y cariño, se instaló en mi sistema anímico y renací a la buena compañía, la confianza y el disfrute del momento.


  • El 7º C de la casa de la diosa jovial y eterna, fue como nunca el séptimo cielo de la emoción y los sentimientos, la burbuja flotó sobre toneladas de ellos en su estado más natural y puro, para estallar al final en confeti de abrazos y cariño...la magia debe consistir en eso, sentir y compartir, una combinación perfecta para enmarcar los lunes en el sitio más sensible de nuestro ser...Hubo dulces, besos de cereza y un maletín lleno de historias...Remedios, Esmeraldas, Angelas, espejos, poesía y objetos perdidos...una terraza, bajada de temperatura, alguna confidencia, unas cuantas fotos, latentes desahogos y la sensación en calma de pertenecer de alguna forma, a un caótico grupo de escritores especiales, y desde luego increíbles personas a las que dar las gracias por llenar mi alma con el derroche de tanto corazón...


  • Con la brisa cálida de un verano que se intuye en el almanaque, más que se disfruta, arribamos a bordo de una burbuja de chocolate, nata y crema, enriquecida con tarta de queso casera que la artesana de los psicobombones elaboró con su peculiar mezcla de sencillez y complejidad, después, bien endulzados, las lecturas dieron para mucho, hubo conversación y pausa, y entre espacio en blanco y punto y aparte, parece que poco a poco se van derritiendo timideces, temores, miedos, corazas, motivos y excusas...¿será la magía del momento, el hogar de la diosa, las palabras escritas y habladas, o lo más sencillo, lo que cada uno aportamos con nuestra presencia?...

  • A veces, inesperadamente, la burbuja mágica abre la puerta del verbo compartir, para quien quiera acercarse a sus orillas de complicidad y palabra...entonces hay visitas, o matizadas de encanto, o en volandas de un despiste olvidado...ambiente de papel, tinta y letra, endulzado con bizcocho de naranja, zumo de naranja, chocolate de naranja, para una sesión naranja...extraña mezcla de dulce y ácido, con un toquecito de amargor, que salpicó el aroma y sabor de la tarde...microrrelatos para todos los gustos y entre sus frases e historias, nos pilló el reloj de la luna, enredados con un maletín de médico, con espejo y que no se abría, libros vivos y generosos debajo del brazo y Rocío Jurado levantándose de su silla para empezar de nuevo...nos marchamos, en el alma, el susurro de Alberto Cortez y Juana Ginzo, preguntándonos..."y tú...¿Que tiras al agua?"...

  • De vueltas con el frío, y la sensación de que este invierno no acaba nunca, el 20 de mayo fuimos acogidos como siempre, por la calidez, ya entrañable, de la diosa jovial y eterna...café, bizcocho y bombones para hacer boca de un encuentro que prometía alguna sorpresa...una ausencia inesperada, gafas nuevas, pijamas, canciones en francés, sueño, puntualidad dentro de la impuntualidad...una revolución, objetos que nos definen, un mini-ordenador como una bola de cristal...un teléfono que no sonó, el timbre de la puerta, una obra de teatro por ensayar...y la burbuja siguió inflándose...palabras, imaginación y risas...que no estalle...

  • El 6 de mayo, la tarde se presentaba cálida y ventosa fuera de la burbuja, dentro acogedora y fresca...olía a ambientador, paredes recién pintadas y a promesas de complicidad y buenos momentos...las ausencias matizaron la sesión con verbos obligados al infinito y a las frases enredadas en relaciones extrañas, intensas e imposibles...también hubo reflexiones, consejos y risas, muchas...las dos horas se alargaron dejándonos llevar por el aliento mutuo de no querernos marchar, pero la magia confabuló con su tiempo y nos despidió en la puerta de un mundo cada vez  más íntimo, compartido y nuestro...

  • El 22 de abril, la burbuja mágica levitó tranquila y suave en el ambiente, para regalarnos una sesión distendida y cumpleañera que celebramos como únicamente sabemos hacer, aparte de los dulces y el café, compartiendo palabras, risas e inquietudes...pues algunas salieron...y se notaron sus influencias en las lecturas, casi todos coincidimos en airear las partes oscuras que anidan en nuestra imaginación, sólo un "noray" al que nos amarramos, sujetó la realidad a nuestros pies, de regreso a la vida desde la muerte. 

  • El 8 de abril desembarcó a las siete en el encuentro más esperado. Nuestros barcos llegaron a puerto con las ganas inflando las velas y aún sin anclar, fuimos capaces de seguir navegando por los mares y océanos de la emoción, el sentimientos y las palabras. Sesión especial de cartas dedicadas, sorpresas y espectador, el primero que osa cruzar su propia frontera para adentrarse en territorio comanche, donde prevalece el buen rollo, ojalá se lo hallamos contagiado...hubo de todo, como casi siempre, incluidas lágrimas y risas, pero sobre todo sensaciones comunes y complicidad...mucha, la que destila la eternidad del tiempo compartido y el querer más...

  • El 25 de Marzo, la burbuja mágica también parecía escapar con destino vacaciones, pero nos engañó, simplemente se transformaba para ofrecernos una sesión distendida, alegre, dicharachera...hubo como siempre mucha emoción en los primeros textos, alguna sorpresa y risas...las ideas nos apabullaron y en el aire la confortable sensación de volver a encontrarnos como cómplices colgados de una misma interrogación...¿hay quien de más?.

  • El 11 de Marzo regresamos por nuestros fueros a la acogedora morada de la diosa, esta vez la burbuja nos envolvió con una sesión intensa e intimista que sacó tripas y escaldó carnes...hubo ternura, nubes de algodón, sensibilidad, recuerdos infinitos, contradicciones, humildad, sentido del humor, espejos y lágrimas...un nudo en la garganta y la necesidad del silencio vistiendo de pausa las palabras...y de un tajo duro y seco, tuvimos que dejar la magia resbalando por techos y paredes, llevándonos esta vez cada uno en nuestro corazón, realidad y verdad.

  • El 25 de Febrero tuvimos que trasladar, puntualmente, la burbuja mágica de casa de la diosa jovial y eterna a la casa de la artesana de los psicobombones...el ambiente rebosaba impaciencia por lo escrito y ansías de ideas, un guión de cine, un autorretrato...nos fuimos calmando según disfrutábamos de las palabras tejidas con sentimientos, humor, ternura, dolor y hasta un regreso a la memoria adolescente nos visitó en forma de enamorado. La sesión continuó aún después de marcharnos, en nuestra cabeza, en nuestro corazón...incluso algunos departieron en un gustoso toma y daca sobre psicología...esto da para mucho.

  • 11 de Febrero, volvimos a la burbuja mágica creada por presencia, silencios y palabras, esta vez con aroma de café y dulces, nos perdimos entre relatos de carcajada y ternura y nos encontramos con ideas nuevas y motivación ilusoria...sentidos, cartas, metáforas, bombones fantásticos, sensibilidad a flor de piel y una despedida sin adiós con la diosa jovial y eterna, enredada se quedó su esencia entre los troncos y copas de unos árboles inventados por sus ganas...

  • 28 de Enero, a la luz tenue de una velas dulces, nos deleitabamos con el arrullo de voces cosiendo letras, volando al mundo de la emoción, entre sensaciones y fantasía, de tal modo que cuando la electricidad irrumpió extraña, no quisimos compartir con ella nuestro tesoro de penumbra cómplice...y apuramos el tiempo y la cera.

  • 14 de Enero, empezabamos una nueva etapa en casa de la diosa jovial y eterna, la tarde noche prometía reencuentros, emoción y sorpresas...y así fue. Compartimos charlas, lecturas y miles de ideas y proyectos, se nos hizo corto el tiempo y la ilusión salpicó de alegría las despedidas.

  • El encuentro fue el día de los inocentes, en casa de una diosa jovial y eterna, café caliente y pastel de puchero, a la alegría de volver a vernos sucedió la desilusión del no puede ser de momento, besos matizados de quizás, acaso, abrazos mullidos y cariñosos y en el horizonte frío que dejó un fastidio, otras ganas renovadas, otras tardes por llegar...más sueños, más esperanzas...

  • Esta vez la Navidad nos ha pillado con felicitaciones inventadas y repetitivas, no pudo ser y se retrasó el momento a vísperas de Nochevieja, el día de los inocentes, pero siempre quedan esos lazos invisibles trenzados de cariño, buenos deseos y palabras, las más maravillosas del mundo...las que todas llevamos dentro y esperan impacientes su relato en un papel escrito.

  • Llegamos puntuales a la cita con Sara Baras para que se nos pusieran los pelos de punta con su taconeo, antes buena cena salpicada de anécdotas de la anfitriona y apuntes de cine, "El ladrón de palabras", "En la casa" y "Yo confieso", la más joven acababa de descubrir que Montgomery Clift era homosexual. Lecturas entre carcajadas y gominolas, pero el sueño y el cansancio terminó venciéndonos aunque un proyecto en común nos mantiene muy despiertas, ya veremos.

  • Jueves, víspera de fiesta y cena en una casa habitada por una ninfa, aunque aún es demasiado pequeña para saberlo...vino espumoso y para llevar de regalo, lecturas entre protestas de bebé trasnochador. El secreto de un sueño, una idea tejida con fantasía y tiempo, la memoria de una playa y sus recuerdos, una historia de amor difícil y el retrato en papel y tinta de una amiga. Como no, hablamos de cine, y un despiste "Cairo time", una verdadera delicia.


  • ...Y como siempre, nos dieron las tantas, enredadas al hilo acogedor y dulce de una casa con dueña especial y mucho alma. Música para abandonarse entre las notas estremecedoras de sus melodías, el sopor de un buen vino blanco con denominación de origen, y de postre, esta vez tocó cine clásico "Esplendor en la hierba","Un tranvía llamado deseo","La gata sobre el tejado de zinc"...y una próxima cita, esta vez con Sara Baras.


  • La noche como el día se estampaba en gris, pero superamos la melancolía con proyectos futuros, ánimos en todos los sentidos y palmaditas en los recuerdos de películas relativamente antiguas "El truco final", "La delgada línea roja", "Cadena perpetua" y salimos convencidas que amanecería con sol.

  • Buena conversación hasta las dos de la mañana y sugerencia por partida doble, "La delicadeza" en versión original en francés y en inglés, valen las dos. Repasamos música de cine, teatro y la trilogía "Fuego","Agua" y "Tierra", y entre mojitos "El café de Flore".

  • He vuelto a compartir el maravilloso final de "Pequeñas mentiras sin importancia", he muerto y he resucitado en Nueva Orleans con la serie "Treme" de David Simon y se me han puesto los pelos de punta con "Contagio" de Sodenbergh.

  • Me han dicho que un señor baila muy bien en "Intocable", se nos han puesto los pelos de punta hablando de "Criadas y Señoras" y he contado el impresionante argumento de "Incendies".

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