domingo, 29 de diciembre de 2013

11 Mayo

   ...Al revés, ella lo sabía pero no le importaba...su casa empezaba en el tejado, sus zapatos eran contrarios y su cama la compartía con...¿ella misma, la soledad, un espejo?...recordaba a veces las risotadas de sus compañeros de clase y los comentarios críticos, sin fundamentos ni razones en la oficina...después de sus vecinos, y siempre siempre su familia...una mañana se levantó con tres años y descubrió que el color de sus ojos cambiaba según el azul del cielo, y a partir de ahí decidió que todas las cosas cambiarían al compás de su mirada...así el mar era un desierto verde, y la lluvia un grifo abierto, un gato una estrella con pelo y los pájaros música en directo...quisieron internarla en aquel lugar invisible, sus padres insistían en una explicación médica, y los resultados de las pruebas que estaba perfecta...y mientras tanto se convertía en mujer sin otro propósito que la niñez, y estudiaba, y trabajaba para divertirse, y viajaba sin equipaje, y dormía al mediodía...tomarse un café era una orden y bailar un ritual...su religión una hoja en blanco y el amor su única voluntad...desapareció una noche...en el lugar se le echó de menos, en su casa hasta entonces, su familia respiró equivocada, y ella...ella, confundió la vida con la libertad...

   ...En el fondo de las cosas se igualan sus definiciones...al final todo es esencia y sensación, esencia de ser y sensación en quien posó indiferente o apasionado su atención...y los fantasmas fluyen como “Pedro por su casa” cuando se confunden definiciones, esencias y sensaciones...nunca me han gustado las “etiquetas”, pero necesito de ellas...recuerdo un libro de Irving Wallace “Fan Club”, un simple reponedor de un supermercado trama el secuestro de una famosa...más o menos ese es el tema en más de quinientas páginas...en la monotonía, es curioso, se desarrolla hasta limites insospechados la imaginación...entonces que pasa, ¿me gusta más imaginar que vivir?...¿me gusta más mirar que tocar?...no lo sé, pero supongo que todo va relacionado...creo que todo, hasta la libertad está dentro de uno mismo...puedes sentirte libre y no serlo, o ser libre y no sentirlo...pero a que viene todo este rollo que te estoy contando...a los fantasmas, los miedos no son invisibles, tienen forma y van vestidos de blanco...no por que sean inocentes y puros, si no para distinguirlos bien en la oscuridad...nos defendemos de ellos creyendo que no saldrán nunca del inconsciente, pero que ocurre si se escapan y anidan en tu conciencia...amor mío ayúdame a espantarlos, o a destruirlos, o a enfrentarme a ellos...vida mía no dejes que me lleven con ellos...no permitas que me conviertan en uno de ellos...sujétame fuerte a tu pecho y déjame tus ojos para mirar...


domingo, 22 de diciembre de 2013

10 Mayo

   ...Como si dudaras de mi amor, vida mía, todos los instantes vividos contigo se multiplican por el infinito en el instante siguiente...¿puedes hacerte una somera idea ahora de lo que siento por ti?...es más que salvaje, es más que increíble, es más que la más inmensa de las inmensidades...y lo que más me apena es precisamente que a veces parece que no te llega lo suficiente...¡Dios mío, con lo que te amo!...no digo que no sepas que te quiero, pero cuando te siento así...¿qué daría por llenarte, por rebosarte, aunque fuese con una gota de lo que yo siento, en esos mismos momentos que me pides, que me necesitas, que me hablas?...todo es poco, ni ordenador, ni papel, ni teléfono, incluso físicamente...mi vida, este amor no tiene limites conocidos...estoy contigo, deberías poder tocarme, por que hace cinco meses y unos días...y justo desde aquel suspiro que solo vivo para vivir en ti...

   ...Nadie tuvo la culpa...bueno...eso la dijeron, aunque ella en ese momento estaba en otra cosa...era ahora, en la fría noche que rozaba el desasosiego y la angustia, qué el día le había clavado en el pecho...casi de madrugada oscura, que aquellas palabras quebraron el llanto sin lágrimas de su cerebro y con ellas el cristal del silencio saltó en pedazos cuando gritó, sin reconocerse, el lamento reprimido...¿de horas, de días, de años?...y quien sabía...su cuerpo inerte apareció flotando entre las olas, por que lo cierto es que la espuma violenta de otras veces parecía mecerlo, acunarlo entre nanas de sal y arena...nadie tuvo la culpa...salió como tantas veces sin decir nada...en realidad ya no era necesario...ella lo sabía y él también...¿de horas, de días, de años?...la culpa atenazó sus manos en la última prenda que dobló y abandonó su idea como sus maletas...quizás unos días antes, unos meses atrás, el años pasado...permaneció sentada sin mirar el reloj, sin pensar en nada, sin esperar la espera...nadie tuvo la culpa...pero es sólo lo que le dijeron...¿le conocía?...ni un beso, ni un adiós, ni siquiera el recuerdo de su última mirada...el rocío mojó sus pasos en esa misma playa...alguien encontró su cuerpo inerte flotando entre las olas, a la misma hora, a la mañana siguiente...la espuma violenta de otras veces mecía su nombre, acunada entre nanas de arena y sal su vida, su muerte...¿de horas, de días, de años?...



domingo, 15 de diciembre de 2013

9 Mayo

   ...Descubrió el sol a la vuelta de aquella esquina, es cierto que la luz cegó sus ojos, pero su piel percibió el contacto tibio de sus dedos...y se quedó parada, así de repente, los pies pegados al piso y su cuerpo inmóvil, sólo su bolso siguió su camino, y sus pensamientos que se le fueron cruzando la calle y saltándose el semáforo en rojo...lo demás vino en punto y aparte al compás de aquel recuerdo, de también aquellos otros dedos largos y tímidos que recorrieron un día, ya muy lejano en el otro tiempo, cada rincón de su ser, cuando no hacia falta descubrir el sol, por que él lo hacía solo rompiendo la oscuridad de golpe, como un martillo que clavaba la mañana...se abandonó, que iba a hacer si no, meciéndose en el aroma que aún impregnaba su memoria y se dejó hacer como se dejaba antes, en aquella playa, en aquella casa, en aquella ciudad...
   ...Le falló el aliento, y después el pulso, sus ojos se cerraron a si mismos y su piel se contagió del blanco níveo de otro invierno...el ruido al caer despistó a la calma, transeúntes anónimos tropezaban con su nombre pero nadie sabía como ayudarla...entonces las palabras enfurecieron su dulce silencio y decidió, así, en un segundo, desplegar sus viejas alas y naufragar...naufragar volando en la conciencia de otras sensaciones, otras almas, otras vidas...
   ...No quiso reconocer su forma en la mancha gris que se hacía cada vez más pequeña, ni derramar lágrimas cómplices de impotencia, como aquellos ya diminutos personajes que se empeñaban, inútiles y desesperados, en explicarse que extraña magia les había sorprendido en un reloj sin hora...una mujer, una calle, el sol que todo lo cubre y una paloma blanca que busca el mar y que surgió de la nada...



sábado, 7 de diciembre de 2013

8 Mayo

   ...Miró por la ventana pero no veía más allá de sus lágrimas...cerró los ojos y se encontró a solas con la oscuridad del dolor, del vacío, de la tristeza...volvió a tientas a la habitación y se tumbó en la cama, las sabanas revueltas rozaron su piel desnuda y quiso nadar en la humedad de su recuerdo...el sol tímido delató la huida de la noche y la ausencia del otro cuerpo tomó forma en su mente...entonces dijo su nombre, y a su alrededor el eco del silencio enturbió el aire, y no podía respirar...un gemido abortó la última silaba y su corazón dejó de latir a la misma vez que la impotencia invadía su pulso...abrió los ojos pero ya no había nada...el cielo arañaba entonces el cristal, y el día llorando...

3 Mayo

...Y necesito escribir, y lo intento, pero no se me ocurre nada...tengo que pensar demasiado y se me van las palabras por las rendijas del silencio...no tengo el ánimo suficiente para la ficción, quizás por que mi realidad supera en intensidad cualquier situación imaginable...no quiero decir con ello que viva en una continua aventura, en selvas o montañas salvajes, ni siquiera que otros países me desafían desde sus fronteras...no...es otro tipo de viaje, también fronterizo, quizás más misterioso que lo desconocido y más osado que el lugar más remoto...no necesito pasaportes, ni vacunas preventivas, ni cheques de dinero, ni apenas equipaje...digo apenas, por que es difícil, por no decir imposible iniciar cualquier camino sin llevar encima ni siquiera un pensamiento...y yo además, es una costumbre en desuso, intento empaquetar bien lo que me es imprescindible...unas cuantas frases de esperanza, los recuerdos intactos del últimos amor y por supuesto un sueño...